Iván Gomezcésar Hernández y Cuauhtémoc Ochoa Tinoco (Coords.), Cuautepec. Actores sociales, cultura y territorio. Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), México, 2019, ISBN: 978-607-9465-80-3

 

 

 

La  obra  Cuautepec.  Actores  sociales,  cultura  y  territorio,  es  la  culminación  del proyecto de investigación ”Diagnóstico Cultural Participativo en Cuautepec”, desarrollado entre 2014 y 2015, por un grupo de académicos y estudiantes de la UACM, plantel Cuautepec y varias organizaciones y comunidades de esta zona. Iván Gomezcésar Hernández y Cuauhtémoc Ochoa Tinoco coordinan este texto conjuntando los trabajos de Hernán Correa Ortíz, Irma Ávila Pietrasanta, Paulina Ibarrarán Hernández, Olivia Leal Sorcia e Ismael Pineda Peláez además de los suyos propios. Como lo señalan los coordinadores, el proyecto contó con el apoyo financiero de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México en convenio con la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM).

Cuautepec es un pueblo originario ubicado en el extremo norte la Ciudad de México que ha sido rebasado de manera importante por el número de población inmigrante que se ha asentado en esta área como se señala en uno de los capítulos. Es un espacio social mal atendido por las políticas públicas del gobierno de la Ciudad de México, pese a que el plantel Cuautepec de la UACM inició sus actividades en 2007 como parte de la política que pretendía subsanar la deficiencia de las políticas públicas del gobierno.

El libro representa una ventana panorámica de la vida social actual y nos muestra diferentes ángulos en el estudio de los fenómenos sociales. A través de los diferentes niveles de profundización de los capítulos, se percibe un

espacio interesante para el estudio de los fenómenos sociales de la Ciudad de México y abona a la escasa bibliografía sobre esta zona. Al mismo tiempo, el texto es muestra de un ejercicio de trabajo con los grupos que son parte del entramado sociocultural, que es el centro de atención del proyecto participativo  que  concluye  con  esta  publicación.  El  lector  encontrará  en esta obra un acercamiento a la complejidad de la Región de Cuautepec”, como la llaman dos de los autores, que es propia de los espacios urbanos de la Ciudad de México. Las diferentes miradas de los autores hacen del texto un  abanico  de  perspectivas  desde  las  cuales  se  enfocan  distintos  aspectos de la vida social. Encontramos ciertas constantes en los trabajos, aunque no todos responden al mismo interés analítico; por ejemplo, se aborda siempre el desarrollo de la ciudad, pero no en todos se le da importancia a la presencia de pueblos originarios y la interacción de expresiones particulares de una misma matriz cultural. Los temas abordados en el libro van desde los antiguos y complejos procesos históricos que influyen hoy día en las dinámicas sociales y culturales, el acelerado crecimiento demográfico incentivado por el proceso de industrialización de mediados de siglo XX, la transformación de los espacios en contradicción con las trazas urbanas antiguas, las políticas culturales y las propuestas ciudadanas, hasta las oleadas de inmigrantes que se convierten en comunidades residentes. También se abordan procesos de apropiación del espacio público por parte de una diversidad de grupos que se han conformado con variados objetivos. En general, el trabajo retrata una población heterogénea que cruza por contradicciones y conflictos en el proceso de construcción de los canales que faciliten la interacción social y con el territorio.

El texto suma un total de 471 cuartillas. Se estructura en 14 apartados, organizados  en:  “Presentación”,  “Introducción”,  tres  apartados  temáticos que reúnen siete capítulos; el primero agrupa dos capítulos, el segundo tres capítulos y, el tercero dos. También cuenta con “Conclusiones”, dos Anexos”, “Bibliografía” (presentada en ocho categorías), y un apartado que nos presenta a los coordinadores y autores de la obra.

La “Presentación”, bajo la firma de Iván Gomezcésar, ofrece el contexto institucional de la UACM como instancia que tiene entre sus principios la relación con las comunidades y grupos sociales.

En la “Introducción” los coordinadores del libro presentan el contexto urbano del proyecto de investigación que dio origen a la obra y señalan los lineamientos metodológicos acordes con los principios uacemitas.

El primer apartado temático, con el subtítulo Territorio y urbanización en Cuautepec” contiene el capítulo 1, de la autoría de Hernán Correa, Ortíz


 

 

“La Sierra de Guadalupe: fuentes documentales, interpretaciones, historias” y, el capítulo 2 de Cuauhtémoc Ochoa Tinoco, “Del set cinematográfico al caos metropolitano. Apuntes sobre Cuautepc en los albores del siglo XXI”. En el primero se brinda una mirada profunda a la historia de Cuautepec desde una perspectiva histórico-cultural. En el recorrido que hace se van presentando argumentos para sostener la propuesta de reconocimiento y de denominación de este imbricado espacio como Región de Cuautepec. El viaje que ofrece este autor es presentado desde una nutrida bibliografía a lo largo del texto, arranca con los procesos geológicos “más recientes” que dieron lugar a la conformación  la  Sierra  de  Guadalupe.  Continúa  con  la  presencia  antigua de  grupos  culturales  diversos  y  sus  contiendas  políticas.  En  este  capítulo se  reflexiona  sobre  la  dinámica  conformación  político-territorial  iniciada con la llegada de los españoles y la influencia simbólica del guadalupanismo como expresión de una continuidad dirigida de manera involuntaria por los evangelizadores coloniales. Llegando a la etapa porfirista, el autor señala que la presencia de las haciendas en Cuautepec sigue marcando la vida productiva de la región y en la etapa posrevolucionaria los cambios económicos y sociales se aceleran. Durante la segunda mitad del siglo XX, la Región de Cuautepec pasa por procesos que pauperizan la vida y sin embargo, las comunidades se reconstruyen con algunos viejos y nuevos elementos. En el segundo capítulo se parte de la mirada preciosista del cine nacional para presentar aspectos de la historia más reciente de la Región, se revisa su composición estructural y la formación de colonias y unidades habitacionales al rededor de los dos antiguos barrios del pueblo originario. Ochoa establece como punto de reflexión el proceso de urbanización popular matizado por el acelerado crecimiento poblacional de las décadas de 1970 a 1990, y el conflicto social para llegar a la formación de un espacio heterogéneo. La mirada analítica del autor está fincada en el planteamiento de David Harvey sobre la organización espacial y las relaciones sociales que se producen en él.

El segundo apartado temático, “Vida festiva y proyectos culturales en Cuautepec”, reúne tres capítulos; el primero de Iván Gomezcésar Hernández titulado  “Fiestas  populares  y  vida  cultural  en  Cuautepec”.  Las  reflexiones que ofrece este autor se enmarcan en la mirada de la cultura popular, desde ahí llama a pensar en las fiestas populares más allá del folclore y a apreciarlas por la importancia que tienen en la reconstrucción de la identidad. En su revisión plantea la revitalización reciente de algunas fiestas. Consecuente con las categorías de “lo popular” el autor aterriza parte de su planteamiento en la


 

 

idea del mestizaje cultural. El lector encuentra aquí imágenes de algunas de las celebraciones rituales, siempre señaladas como fiestas populares, que expresan su función social cohesionadora. Las descripciones de seis fiestas (Las fiestas del Señor de Cuautepec, viernes de Cuaresma, Virgen del Carmen, el carnaval y los huehuenches, la Semana Santa y, Día de Muertos), resaltan el contraste de la riqueza del colorido y performance dinámico frente a la rígida arquitectura y predominio del gris del cemento de la urbanidad moderna. Irma Ávila Pietrasanta es la autora del capítulo titulado “T+C/ Territorio más creatividad, políticas  culturales  y  autoconstrucciones  identitarias  en  Cuautepec”.  Desde la perspectiva sociológica del espacio público y privado, se revisa la oferta cultural que ofrecen actividades como deportivos, escuelas, centros culturales, bibliotecas,  y  presenta  una  reflexión  acerca  de  la  apropiación  del  espacio público en la vida cotidiana por parte de los diversos grupos sociales presentes en este espacio. La autora revisa aspectos acerca de las políticas y derechos culturales y territoriales, y hace un recorrido por la historia de construcción y frustración del proyecto de Faros de Cultura y de la Escuela de Artes y Oficios como muestra de la distancia entre las políticas culturales oficiales y la realidad social en que se insertan. En contraste con la política cultural oficial se presentan diversos ejemplos de creadores independientes que con su trabajo cultural impulsan la construcción de identidades colectivas. El tercer capítulo de este apartado Actores, espacios y dinámica cultural en Cuautepec” es de la autoría de Paulina Ibarrarán Hernández. Continuando con la misma perspectiva del texto anterior, la autora ofrece otros ejemplos de propuestas culturales y deportivas autogestivas. En su discurso, la autora destaca a la UACM como institución  incentivadora  dada  su  permanencia  y  postulados  de  vinculación con la comunidad con los que desarrolla su labor académica. Para la autora el objetivo común de la diversidad de propuestas es transformar el espacio y la construcción de identidades grupales, comunitarias o territoriales.

Bajo  el  título  “Diversidad  étnica  en  Cuautepec:  estudios  de  caso”, encontramos  dos  capítulos,  el  primero  de  Olivia  Leal  Sorcia  “Diversidad

étnica en Cuautepec: estudios de caso”, donde se presenta la historia de la casa de cultura Vista Hermosa cuya característica es que fue impulsada por familias  nahuas  de  Chilacachapa,  Guerrero.  A  partir  de  la  reconstrucción de la historia de origen y función de esta casa de cultura, la autora propone la  noción  de  “espacio  etnificado” y  argumenta  sobre  dos  postulados:  “los sujetos indígenas más que ser determinados por las lógicas espaciales urbanas, participan activamente en su configuración” y el “reconocimiento étnico…


 

 

da  cuenta  de  interacciones  tensas  y  conflictivas  entre  colectivos  indígenas y no indígenas asentados en espacios urbanos”. A través de este análisis el lector recorre el entramado de circunstancias bajo las cuales este grupo de inmigrantes nahuas se establece y reconstituye como comunidad frente a otros grupos inmigrantes residentes y originarios en el ámbito urbano. El segundo capítulo de esta sección, y último del libro, titulado “Mundos distantes: Diversidad  indígena  en  Cuautepec”,  está  escrito  por  Ismael  Pineda  Peláez. Este texto destaca la presencia de una diversidad de grupos de inmigrantes que se asentaron en la Ciudad de México. Se centra en los casos del llamado Grupo oaxaqueño y del hiphopero Juan Sant. El Grupo oaxaqueño se encarga de organizar las celebraciones a la Virgen del Rosario y también ha funcionado como aglutinador de grupos culturales diversos que se encuentran dispersos por la Ciudad. Por otra parte, la historia de Juan Sant expone los vaivenes de un joven que reconstruye su identidad cultural frente a los peligrosos avatares de la vida marginal de las calles de la Ciudad. El autor llega a la conclusión de que la “conciencia y aceptación indígena” se alimenta tanto desde lo colectivo como desde las experiencias individuales frente al debate sobre los derechos étnicos.

El apartado de “Conclusiones” presenta una recopilación de las ideas centrales,  tales  como  que  se  descubrió  un  espacio  diverso,  complejo  y conflictivo, se encontró la presencia de una población mayoritariamente inmigrante que vive en condiciones de exclusión social. Sobre la cultura se menciona la falta de oferta y equipamiento oficial al tiempo que se destaca la fiesta popular  como  espacio  de  recreación  y  reinvención  identitaria  de  los nativos del pueblo de Cuautepec. También se menciona que las fiestas se han adaptado a la migración y a la urbanización popular (sic) y expresan “una suerte de mestizaje”. Las últimas reflexiones de este apartado están dedicadas al proyecto “Diagnóstico Cultural Participativo de Cuautepec” y el papel que puede tener la UACM en el entorno de Cuautepec, así como otras instituciones oficiales que han descuidado la oferta cultural de esta zona.

En los anexos encontramos un documento elaborado en el evento “Reflexiones sobre la relación entre la comunidad de Cuautepec y la UACM” y un anexo fotográfico compuesto por 16 tomas en su mayoría de la lente de Iván Gomezcésar.

La bibliografía, organizada en 8 categorías de fuentes, presenta un cuerpo documental compuesto por libros, fuentes de archivo, documentos oficiales, información electrónica, audiovisuales y entrevistas entre otros. La bibliografía precede al apartado de presentación de los coordinadores y los autores.


 

 

Por último, el libro Cuautepec. Actores sociales, cultura y territorio es un material

útil como primer acercamiento a Cuautepec y al mismo tiempo la variedad de los enfoques de los capítulos puede prestarse para un ejercicio metodológico de comparación de perspectivas de análisis y de reflexión sobre el resultado de un proyecto de investigación participativo. Sin duda un libro que abona al conocimiento de los procesos socioculturales del extremo norte de la Ciudad de México.

 

María Teresa Romero Tovar

PUIC-UNAM